Las Relaciones Internacionales (RR. II.) es una disciplina que ha estado luchando por sobrevivir en medio de crisis durante más de un siglo. Se encuentra en un estado constante de crisis, particularmente en cuestiones de orden ontológico, epistemológico y metodológico los que esencialmente definen a una disciplina. Cuando se añaden interrogantes relativas al punto focal o tema de investigación de la disciplina, así como a sus objetivos prácticos o teóricos, resulta evidente que el campo también carece en el abordaje de cuestiones éticas, ideológicas e incluso pedagógicas. Una disciplina no puede sostenerse indefinidamente mediante mitos infundados, desde sus orígenes fundacionales hasta su historiografía y debates teóricos. Este estado de sucesos socava tanto los fundamentos sobre los cuales se asienta la disciplina como su identidad disciplinaria independiente. Esta situación también lleva a declarar a las RR. II. como subordinadas a diversas otras disciplinas, que abarcan desde la Ciencia Política y la Economía hasta la Geografía y la Sociología.

El problema fundamental está estrechamente relacionado con el concepto mismo de lo “internacional”. La disciplina está innecesariamente perseguida por el espectro de la “nación”. La revista Global Relations sostiene que las RR. II. deben liberarse de la hegemonía conceptual de “nación/internacional”, que nunca ha sido y nunca debería ser un elemento fundacional o definitorio de la disciplina. En este contexto, se propone reemplazar el enfoque de la disciplina con el concepto de “globo”, que expresa la unidad de la humanidad, la naturaleza y la Tierra. En consecuencia, se sugiere renombrar la disciplina como las “Relaciones Globales”. El objetivo es contribuir a reestructurar un campo que ha sido moldeado por un nombre engañoso, una falsa conciencia y un programa de investigación erróneo—uno que ha sido distorsionado y desalineado—para convertirlo en una verdadera disciplina que se sustente sobre bases sólidas y contemple el mundo con una perspectiva más amplia. La revista busca contribuir a la transformación de las RR. II. en una disciplina integral e inclusiva, denominada las “Relaciones Globales” (GG. RR.), que examine el globo en su totalidad, de Este a Oeste y de Norte a Sur, abarcando todas las entidades vivas y no vivas, dimensiones materiales e ideacionales, y todos los problemas asociados.